Nombre
El Demantoide o Granate Demantoide se descubrió en1849 y su denominación fue impuesta en 1855 por el Dr. Nordenskjöld, quien clasificó además a la Alejandrita. El Dr. Nordenskjöld derivó el nombre del antiguo alemán “demant” (similar al Diamante), en consideración de su brillo adamantino, de sus reflejos extremos (sparkle) y de un fuego (considerado “dispersión”, es decir la capacidad de descomponer la luz en sus colores espectrales) que es superior al del Diamante. Si bien Nordenskjöld había determinado correctamente la especie a la cual pertenece el Demantoide, en los tiempos siguientes a su descubrimiento, el Demantoide fue designado con una gran variedad de nombres comunes y corrientes: Granate Bovrovka, Crisolito Siberiano, Crisolito de los Urales, Perla de los Urales o Esmeralda de los Urales. Afortunadamente, en el 1871, el minerólogo ruso V.P. Yeremeev puso las cosas en orden confirmando que el Demantoide pertenecía a la variedad verde de la Andradita, o sea una tipología de Granate.
Composición química del Demantoide
El Demantoide es un granate de calcio perteneciente a la variedad de la Andradita y junto con el Granate Grossularia, llamado también Tsavorita, un exponente de los Granates verdes. Los Granates son un grupo de minerales idiocromáticos con estructura cristalina similar entre ellos pero con composición diversa; se presentan en una varia gama de colores: chocolate, rojo, anaranjado, verde, rosa, púrpura, amarillo y azul.
Extracción del Demantoide
En un tiempo se consideraba que el Demantoide fuera destinado a quedar como un recuerdo del pasado, pero la recuperación de la actividad minera en pequeña escala en Rusia a partir de 1991 y el descubrimiento de nuevos yacimientos en otros países ha renovado el interés debido a las múltiple y atractivas cualidades de esta gema. El Demantoide es extraído hoy en Irán, Italia, Madagascar, Mozambique y Namibia, aunque la calidad del Demantoide ruso, que presenta los verdes más intensos es el estándar de referencia en el mercado. Las diferencias de color entre un yacimiento y otro dependen de varios niveles de cromo o, como en el caso del Demantoide de Madagascar, de la ausencia total de dicho elemento.
Recordemos que todos los yacimientos mencionados producen auténtico Demantoide: toda la Andradita verde es Demantoide, independientemente de la explicación científica de las formaciones del color. Mientras que la caída de la Unión Soviética ha permitido reactivar muchos de los yacimientos originarios en los Urales, nuevos yacimientos de Demantoide ruso han sido descubiertos en los años 90, entre ellos los de Karkodino, Kamchatka, Chukotka y otros más pequeños en la región de Novouralsk.
Historia del Demantoide
A causa de la semejanza del color, el Demantoide en un primer momento fue tomado como Esmeralda y luego erróneamente vendido como Crisolito. Crisolito que significa “gema dorata” y es la antigua denominación del Peridoto (una variedad del grupo de la Olivina). Cuando el Demantoide llegó al mercado de las Piedras Preciosas su belleza sin fin le aseguró un éxito inmediato. Como gema protagonista de la exclusiva joyería victoriana el Demantoide tuvo un gran suceso en su patria de origen, la Rusia zarista. De inmediato se convirtió en una de las Piedras Preciosas más usadas de los joyeros de la corte del zar en el período que va desde los finales del 1800 hasta las primera década del 1900. El Demantoide fue la Piedra Preciosa preferida del famoso orfebre ruso Peter Carl Fabergé (1846 -1920), creador de los fabulosos huevos de pascua de oro, cuajados de Piedras Preciosas y con miniaturas en su interior. La majestuosidad del Demantoide se difunde más allá de los confines de Rusia. Causó sensación entre los grandes maestros de joyería franceses e incluso el legendario George Frederick Funz (jefe gemólogo de Tiffany & Co.) fue enviado a Rusia para adquirir todo el Demantoide que fuera posible. En Rusia se venían grandes cambios. Lenin había regresado de su exilio, la revolución estaba en plena marcha y los lujos burgueses como las Piedras Preciosas fueron netamente prohibidos. Sin tener la posibilidad de producirla, la demanda disminuyó completamente y una gema que había sido tan codiciada fue relegada a los márgenes de la historia. Hoy el Demantoide vive un renacimiento aunque por su rareza gemológica y la dificultad de extracción permanece una Piedra Preciosa no demasiado disponible.
El Demantoide era la Piedra Preciosa preferida de Peter Carl Fabergé (1846-1920), el joyero ruso célebre por su “Huevos de Pascua Imperiales Fabergé”
Características del Demantoide
Como las Esmeraldas, el Demantoide debe su color al cromo y/o al hierro y varía del verde vivo (verde foresta) al verde amarillento (verde hierba) y al amarillo-verde (sabana o verde canario), incluso en África se encuentran ejemplares de verde azulado y verdes grisáceos. En la Andradita es el hierro quien determina el amarillo, pero cuando éste es remplazado por cromo la gema presenta matices de verde. Si en el Demantoide queda algún resto de hierro el resultado será un verde claro con tonalidades de amarillo. Es decir que entre más hierro contenga el Demantoide, mas amarillas serán sus tonalidades. Como en el caso de muchas Piedras Preciosas de colores el ideal se encuentra en el medio, y en el caso del Demantoide esto coincide con un intenso “verde esmeralda”. Si la Esmeralda es el punto de referencia estándar a la hora de clasificar las gemas verdes, en el caso del Demantoide el juicio acerca del color no será suficiente, en cuanto otros factores deben ser considerados y puestos a examen como su brillo adamantino y la intensidad de sus destellos (sparkle). La otra propiedad óptica a considerar es su fuego: el Demantoide es efectivamente el granate con el fuego más alto de todos, con un índice de dispersión de 0,057, incluso mayor que el del Diamante (0,044). Un fuego fantástico en una gema aumenta su belleza y su valor. En general el Demantoide resulta mejor a la luz del día, y como contiene hierro y cromo se produce un leve cambio de color cuando se lo observa con luz encendida. El GIA clasifica el Demantoide como gema de tipo II (pequeñas inclusiones a simple vista), pero el estándar de mercado es eye-clean (ninguna inclusión vista a la distancia de 15 cm)
En realidad, el Demantoide de más de medio quilate no es eye-clean y la mayoría de esta Piedras Preciosas son de dimensiones inferiores al quilate. Demantoidees de i a 2 quilates son excepcionales y cualquier ejemplar superior a 5 quilates es para exponer en un museo. Los Demantoides europeos se diferencian de los africanos a causa de sutiles inclusiones fibrosas de amianto que se irradian “a cola de caballo”. Estas sutiles agujas de Crisolita forman dibujos a golpe de pincel, frecuentemente con diminutos cristales de cromita al centro. Los Demantoides de Namibia y Madagascar no poseen verdaderas “colas de caballo”. Pero como en la elección del color también esto es una cuestión de gusto personal. Como el Demantoide es un Granate muy raro y costoso es necesario asegurarse que las inclusiones “a cola de caballo” o de cualquier otra índole no afecten la belleza de la gema.
Variedad del Demantoide
Acompañando al famoso Demantoide ruso, que determina el color estándar de mercado y que hasta el día de hoy es muy escaso, es posible encontrar los maravillosos ejemplares extraídos en Namibia. Su particularidad es el color, si bien algo más claro que el Demantoide ruso por la cantidad inferior de cromo presente en su composición química pero con un brillo excepcional. A partir de los años 70 hizo su ingreso en el mercado el Demantoide italiano y desde el 2002 el Demantoide iraniano. Recientemente se han descubierto yacimientos en Madagascar: inicialmente intercambiado por Zafiro verde o por Circón verde, la extracción de este Demantoide ha iniciado en el 2009, a pesar que había sido detectado ya en el 1922.
Cuidado del Demantoide
El Demantoide puede ser dañado de fuertes cambios de temperatura, por lo tanto es recomendable no exponerlo a limpieza a vapor o con ultrasonido.